Casa rural con desayuno en Cantabria

“Casa muy limpia, acogedora y completa. Los dueños muy amables y simpáticos, tanto Conchi como Joaquín nos aconsejaron donde ir.”

“Un trato estupendo y un entorno inmejorable. Con ganas de repetir.”

“Relajante, si vas sube a la vaqueria que está justo encima y verás el proceso del ingente trabajo para que tengamos leche, sin horario, ni fiestas, la dueña es todo un portento. Saludos”

“Fuimos un grupo de 22 personas y disfrutamos mucho de la estancia. La casa está muy bien acondicionada y aislada, limpia y cuidada al detalle. Todas las habitaciones tienen un encanto especial y la planta baja tiene un salón comedor y cocina muy amplios, además de la barbacoa en el jardín, la sala de juegos con billar y aseos individuales que hacen la estancia aún más cómoda. Un 10 para la atención de Sofía que desde el primer momento nos dio muchísimas facilidades y opciones para disfrutar de la casa y los alrededores porque hay rutas a pie en un entorno precioso. Súper recomendable para familias y grupos de amigos.”

“La casa está fenomenal. Grande y con todo lo necesario. Sitio muy tranquilo y precioso. Beatriz muy amable y nos recomendó sitios por la zona que estaban muy bien”

“Lugar mágico! El entorno es espectacular, carreteras sinuosas y en medio de ninguna parte (realmente muy cerca de Potes), ideal para los que buscan paz y tranquilidad. La atención tanto de Laura madre como de Laura hija fue magnífica, nos hicieron sentir en familia. Muy recomendable.”

“Pasamos este fin de semana de lo mas relajante. La casa muy acogedora, las habitaciones muy amplias y limpias. El desayuno muy variado, con zumo natural, tabla de embutidos, bizcocho casero. Los dueños Susana y Mario encantadores. Volveremos seguro además el entono es muy relajante para hacer rutas y visitar el entorno. Recomendado 100 por 100.”

“Toda Cantabria es espectacular, pero alojarse en La Posada del Tenor hace que la experiencia sea aún más especial. La casa es preciosa y cada estancia está decorada con todo lujo de detalles. Las vistas desde el jardín te dejan sin palabras. Es un lugar que rebosa mucha luz, arte y amor. Eduardo es una persona encantadora y te da consejos que solo un local puede dar: buenos restaurantes, rutas y sitios inéditos que seguramente no aparecen en las guías turísticas. Su tortilla de patatas está mucho más rica de lo que podáis imaginar (también nos declaramos fan de los higos que prepara su padre). Además, es un artista de los pies a la cabeza. Como buen tenor, puede que lo oigáis ensayar alguna mañana. También pinta y tiene obras suyas por toda la casa. Sus mascotas, César y Salem, son lo más y nos robaron el corazón desde el primer día. A nivel práctico, Molledo está muy bien situado para moverse por toda la zona. El precio que pagamos está muy por debajo de todo lo que ofrecen. Gracias por todo, esperamos volver muy pronto.”

“Albergue para 100 personas aproximadamente. Embalse del Ebro muy cercano. Lugar imperdible para pasar unos días con los niños y las niñas del Colegio. Lo hemos pasado genial. Gracias a todo el personal del albergue.”

“Viajé con mi familia y nos hospedamos durante una semana en la posada. Es una maravilla, silencio, tranquilidad y unos desayunos insuperables (10/10). Tiene unas vistas muy bonitas y las habitaciones son ideales para descansar. Los dueños, Sofía y José Carlos son un encanto, un 11 de 10, siempre atentos a nosotros. Lo recomendaríamos y repetiremos sin dudarlo.”

“Una Posada rural ideal para tu estancia en Cantabria. Tranquilidad y relax seguro. Es familiar y nos sentimos como en casa. El ambiente muy acogedor y agradable. Cuando volvamos a Cantabria ya sabemos donde nos alojaremos. 2023: ¿Quién dijo que segundas partes nunca fueron buenas? Después de 7 años hemos repetido nuestra experiencia y ha sido magnífica. Animaos porqué merece la pena. Muchas gracias a Fran y a su familia por hacernos sentir como en casa. Un abrazo y hasta pronto!! No hay dos sin tres!!”

“Un alojamiento precioso, con una decoración con estilo y detallista acorde al entorno. Yo me alojé con mi pareja en la habitación abuhardillada y era espaciosa y acogedora. La propietaria Ana, fue un encanto con nosotros desde el primer día. Recomiendo el desayuno que preparan Ana y María José, los frisuelos riquísimos. Repetiría”

“Nos encantó, las habitaciones limpias y acogedoras, la casa bien equipada, el lugar hermoso, la casita en general como de cuento... Volveremos”

“Nuestra experiencia en mirador de picos ha sido magnífica. Estuvimos 4 noches, el primer día nada más llegar, cenamos allí con ellos. Y el resto de noches no dudamos en volver a cenar allí. Su tabla de tomates, espectacular, la ensalada de picos, deliciosa, el bonito del norte... Alucinante. Y cenar con esas vistas y en ese jardín. No tiene precio. Raciones generosas, y deliciosas. La habitación con unas vistas de los picos increíbles, ambiente tranquilo, relajado y todo muy limpio. Luis y Lorena nos han tratado de maravilla, volveremos sin ninguna duda!! No podíamos haber elegido lugar mejor para nuestras vacaciones. ( No dudéis en cogerle unos tomates de su propia huerta a Luis, no encontraréis unos mejores y su vecino también Luis, hace un pan delicioso)”

“Entorno con encanto total. La comida espectacular, exquisita, todo natural y de elaboración propia. Los postres como guinda , deliciosos. Trato muy amable. El señor Aparicio y su familia , gentes muy atentas. Seguro que volveremos, el pueblo más bonitos que he visto.”

“Una posada extraordinaria en un lugar mágico. Experiencia de lujo en un enclave precioso, Bárcena Mayor, en el corazón de Cantabria, visita imprescindible dentro del parque natural Saja-Besaya. La posada es espectacular, una casa típica montañesa decorada con exquisito gusto e impresinantes vistas a la montaña (como se puede ver en la foto sacada desde la habitación). Un trato y un servicio de 10, por parte de todo el personal. Los desayunos, completísimos y variados . Gracias Dani, Paloma, por la experiencia. Sin duda, volveremos.”

“Estancia muy tranquila y sensación de paz. Confortable, tranquilidad y sosiego. María, la propietaria muy amable y cordial, es super atenta. Desayuno muy bueno y agradable. Muy recomendable y para poder repetir.”

“Lugar muy agradable y acogedor con un entorno de ensueño. Muy recomendable el yoga en el jardín. Maravilla en los meses de verano.”

“100% recomendable, Ana siempre está atenta a cualquier detalle y las habitaciones son top!”

“Un trato muy bueno de su dueña ( Lourdes)y limpieza un 10,avitaciones muy cómodas para volver seguro.”

“Estuvimos alojados 3 días en la semana del pilar, tanto la atención de Lidia ( desde la llegada hasta la salida Lidia es un 10, el trato, la amabilidad, es una persona encantadora.) la habitación muy cómoda, limpia e ideal para descansar, muy buena ubicación, 15 minutos andando al casco antiguo de Santillana, aparcamiento amplio, y el desayuno muy bueno. Totalmente recomendable 100%, gracias Lidia por ser una anfitriona 10, volveremos a visitarte.”

“Una experiencia para repetir. Nos ha encantado pasar unos días en la posada . El servicio es espectacular, el desayuno buenísimo, habitaciones limpias. Una paz y tranquilidad que va genial para descansar y desconectar. Javier muy amable y atento en todo momento. Además hay parking propio si vienes no coche. Nos ha encantado, totalmente recomendable y sin duda volveremos a repetir”

“Experiencia excepcional! Hemos disfrutado mucho durante 1 semana. Los dueños inmejorables, mencion especial a Joaquin que incluso por mi cumpleaños nos regaló un bizcocho con velas para celebrarlo! Entorno maravilloso para relajarse y disfrutar de la finca. Un abrazo grande y esperamos volver pronto!!”

“Establecimiento cuidado al detalle con unas habitaciones preciosas e impecables de limpias. El spa está de maravilla y tiene de todo. Hay que resevar y llevar ropa de baño, chanclas y gorro (duración de 45 minutos). El desayuno también muy completo con dulce, salado, fruta, un pan maravilloso de la panadería del pueblo (merece la pena visitar también), zumo de naranja, café y leche a demanda. Y todo con una atención y un servicio maravillosos por parte de una familia encantadora que se lo curra para dar un servicio de máxima calidad. Ojalá los tiempos mejoren y podáis seguir disfrutando y haciéndonos disfrutar de vuestro proyecto.”

“Increíble atención por parte de la chica de recepción y por parte de la dueña. Encantadoras ambas. Lugar con mucho encanto, preciosas vistas. Si buscas dónde relajarte no dudes en este lugar de desconexión y naturaleza. Precioso jardín, habitaciones y baño amplias. Zonas comunes muy acogedoras. Si vuelvo a Picos de Europa, sin duda repetiré en este precioso lugar.”

“Fantástico alojamiento en una bella ubicación. Muy buen desayuno y lo mejor la atención de David, pendiente de nosotros antes, durante y después de nuestra estancia. Volveremos ¡”

“Una experiencia increíble. El sitio es una pasada, tanto el establecimiento como el paisaje que lo rodea. Desayuno estupendo y la habitación tipo dúplex con la bañera de hidromasaje es genial! Los dueños son un encanto y el trato es espectacular, recomendado al 100%”

“Hotel con mucho encanto en un antiguo caserón renovado. Las habitaciones y camas son muy cómodas, los espacios comunes tienen vistas muy bonitas, y sofás para relajarse. Tienen un jardín muy cuidado y en general el lugar es acogedor y hogareño. Su ubicación es muy buena para visitar Cantabria. Gracias por vuestra hospitalidad!”

“La experiencia ha sido de diez. El personal y el trato es maravilloso, atento y agradable, el sitio es tranquilo, muy familiar y con unas vistas muy bonitas. Nosotras cogimos habitación compartida (proporcionan sábanas y mantas por si refresca) y baño compartido, pero hemos tenido suerte de estar solas en la habitación y en el baño (desde el albergue priorizan repartir las huéspedes por las habitaciones y no juntarlas todas en una hasta que no es necesario), destacar que los dos espacios están muy limpios (toda la casa en general). Decidimos cenar el último día de nuestra estancia en el albergue y toda la comida es casera (natillas incluídas!!!). Además, si se quiere hacer surf, visitar el parque natural de cabárceno u otras muchas actividades, te hacen un 20% de descuento si te alojas en el albergue; y si lo que se quiere es hacer turismo más rural, desde el albergue se puede llegar a una ruta (rodeando el río Basaya) con cascadas y cuevas. Y para acabar, dentro del albergue hay juegos de mesa y una tabla de ping-pong! Recomiendo totalmente este sitio, yo espero volver a repetir esta experiencia y lo mejor es que la puedes vivir a un coste muy económico.”