Centro Médico Babynat

"Profesional, humano, cariñoso, un trato excepcional tanto para los niños como para los padres, tanto Juan, como Alicia y las enfermeras que atienden. Si hubiera 10 estrellas se las daría. Recomendable al 200%"

"Llevo 8 años yendo con mi hijo. El trato no es bueno, es INMEJORABLE! Tanto Juan como Alicia son encantadores, al igual que las chicas de recepción. En fisio bronquial más de lo mismo. Un 10 xa todos ellos. Seguid así. Nuestros pequeños os necesitan"

"Juan es un médico bastante altivo y prepotente. A mi hijo le llamó foca por estar rellenito. Opina sobre lactancia cuando no tiene los conocimientos suficientes para poder hacerlo, diciéndome que tengo que dejar llorar a mi hijo si tiene hambre hasta pasar unas determinadas horas (cuando la lactancia es a demanda) o que le deje llorando en la cuna si quiero que aprenda a dormirse solo (se dormirá no porque aprenda a dormirse, sino porque entenderá que no voy a ir y no voy a hacerle caso) Está también muy desactualizado en alimentación complementaria. Sin explicación ninguna, me dio unos documentos que debe tener hace bastantes años con información obsoleta sobre ello. Si mi hijo es una foca, hasta los 6 meses puede estar con lactancia materna exclusiva como se recomienda y no tenerle que dar cereales en biberón o fruta desde los 4 meses como el doctor dice. No volveremos."

"Tanto el doctor como la doctora son excepcionales, así como el personal de enfermería. Me parece clave tener un pediatra de confianza, en el que poder confiar. Nos ha ayudado desde que nació nuestro hijo en todos los aspectos: médicos y también nos han dado valiosos consejos, aplicables en el día a día, respecto al comportamiento de los niños en función de su edad. Siempre dispuestos a ayudar, también telefónicamente cuando lo hemos necesitado. No podría decir nada negativo. Los diagnósticos y tratamientos siempre han sido acertados. Si tuvieramos otro hijo, sería nuestro pediatra de referencia."

"Una experiencia nefasta. Un médico muy desactualizado, irrespectuoso y prepotente. Ninguna empatía con los pequeños. Le dimos varias oportunidades porque íbamos recomendados por un amigo, pero en ninguna visita ha sido amable, ni cuidadoso con mi hija. La manipulaba como si fuera un saco de patatas. La pequeña estaba llorando y el médico le faltó el respeto a ella y a mi por querer consolarla. Debería ser más respetuoso teniendo en cuenta que es una consulta privada y que tampoco es un pediatra que aporte mucho. A mi hija le costó siete meses superar el miedo a los médicos. La enfermera de mi centro de salud está más actualizada que el."