Phylco

"Me pedi un crep de jamón serrano y queso brie. En primer lugar el queso no era brie y además el jamón estaba tieso (incluso costaba masticar), no lo tuvo ni 30 segundos en la máquina de creps y la masa estaba blanca sin dorar."

"No saben servir el helado y a mi sobrino al chuparlo se le cayo al suelo, las dependientas tienen pinta estar cansadas."

"No pidáis gofres... Son congelados y los recalientan en el microondas... Los crepes son naturales, seguro que están buenos, no los probamos... Pero los gofres no están buenos"

"Helado?? De vergüenza!! En la vida me ha pasado esto en una heladería. Pedir una tarrina pequeña, y que te den una bola pequeña sacada a trocitos, ni siquiera era compacta, sobraba tarrina por todos los lados, nos han servido una pequeña "bola", la tarrina es la tarrina, no una bola. Con el malestar y el sentimiento de estafa, y engaño, lo he comentado a la chica que me ha atendido, y le he preguntado ¿Con una tarrina servís una bola?? Y me ha contestado "es lo que me has pedido, una bola", y le digo, "no, te he pedido una tarrina, y me dice, "es lo mismo". He terminado mi conversación diciendo que era una risión de helado. Siempre que he ido a una heladería y he pedido una tarrina, es una tarrina completa, llena. ¡QUE VERGÜENZA!! espero que mi reseña sea para que los futuros visitantes ni siquiera pasen por aquí y les generen el malestar."

"La chica que atiende no tiene mucha actitud. No hay café. Pedimos un crep y un gofre, empezó a hacer el crep y al rato nos dice que no hay gofres (sin entrar en la cocina ni nada, podría haberlo consultado antes). Podríamos habernos ido, pero decidimos quedarnos ya que estaba haciendo el crep. Según la carta, el crep es 4'70€ y 0'50€ por topping, y fue un crep con un topping. Nos cobró 6'60€, se lo dijimos e hizo un gesto con la cara y nos devolvió 0'60€, todavía no me salen las cuentas. Lo pedimos para llevar y nos fuimos. Puedes verlo en el apartado de "fotos", en las reseñas aparecen las fotos cortadas por defecto. En la primera foto, a la izquierda, justo debajo del primer cartel, aparece el horario y el nombre de "Phyco", y en la puerta pone "Phylco", ni ellos saben como se llama."