Relaciones interpersonales en Ronda, España

“Sólo puedo decir que bendita la hora que tomé la decisión de querer sanarme y poder conocer a Patricia que es una gran profesional. Un trato súper cercano y para nada frío. Impresiona la capacidad para conocerte tan bien. Desde luego que recomiendo su terapia y por supuesto que para mí ha sido fundamental. Gracias siempre”

“Para mí estar acompañada por Marta está siendo un viaje muy muy enriquecedor. Con ella siento que puedo ser yo y me siento muy sostenida y guiada. Gracias al espacio terapéutico, estoy aprendiendo tanto de mí misma que cada vez me escucho más y siento que me gusta ser quien soy y esto es un regalo maravilloso. Siento que Marta me sostiene y me ha sostenido de una manera que da mucha paz. Navegar y transitar este espacio online de terapia con Marta es algo muy reparador y muy especial para mí.”

“El colegio San Isidoro es un excelente colegio, tienen a los mejores profesionales. Un trato cercano, accesible y de gran calidad humana. La educación de nuestros hijos es una decisión muy importante y allí se ocupan de que los niños aprendan sin descuidar sus necesidades, dando siempre prioridad a su bienestar. Sin duda, la mejor opción.”

“Llevo cinco años en terapia con David y es la primera vez que me he sentido realmente cómoda durante un proceso terapéutico. Entre otros muchos motivos, por el trato horizontal, el chequeo constante de los cuidados y el esfuerzo por construir un lenguaje común a través del cual comunicarnos, estar cómodos y construir un lugar seguro para mostrarse vulnerable. De las cosas más importantes que llevo conmigo es el hecho de estar trabajando herramientas para el presente y que, a su vez, son útiles para reparar el pasado. Esto ha sido algo determinante a la hora de encontrarle un sentido práctico a la terapia, el hecho de que pudiera afectar de forma tan directa y positiva a mi cotidianeidad. Otro de los grandes aprendizajes con David, ha sido aprender a poner límites como forma de autocuidado y no tratar de erradicar partes de mí, sino convivir con ellas y escucharlas para llegar a entender cuál es su función y qué necesitan.”