Restaurante Rías Baixas

"Recientemente visité un encantador restaurante gallego que me dejó una impresión inolvidable. Desde el momento en que entré, el ambiente cálido y acogedor me hizo sentir como en casa. El personal era excepcionalmente atento y amable, brindando un servicio que superó todas las expectativas. La joya de la corona fue, sin duda, su exquisito rodaballo. Cocinado a la perfección, cada bocado era una mezcla sublime de sabores y texturas que capturaban la esencia de la cocina gallega. Además del rodaballo, cada plato que probé estaba lleno de autenticidad y amor por la comida tradicional. En resumen, este restaurante no solo me ofreció una experiencia culinaria excepcional, sino también un trato cálido y profesional que me invitó a volver. Sin duda, un lugar altamente recomendable para cualquiera que busque disfrutar de lo mejor de la gastronomía gallega."

"Sitio donde poder comer si te gusta algo parecido a Coruña, bien atendido por magdi y buena cocina con chimo"

"Se trata de un pequeño restaurante con ambiente gallego sin grandes florituras. La comida tiene calidad en si misma para merecer degustarla, pero el precio estropea la relación entre ambas. Usando los descuentos de The Fork, se reduce mucho el factor precio y la relación mejora bastante. Tienen un menú de 13'95€ con 2 platos, 1 bebida y postre, que merece mucho la pena. Habría que añadir el pan y el café y quedaría perfecto. El personal es muy agradable, aunque un poco despistada, pero compensa su amabilidad. Puede que vuelva otra vez con la familia."

"Es la segunda vez que voy, pues decidí aprovechar la oferta de Yums de The Fork para cenar ahora, que esa zona de Alicante no está muy concurrida (por las obras y el calor, hay menos gente). Pedimos el pulpo (la foto la hice cuando ya nos habíamos comido medio plato), bacalao con tomate (totalmente recomendable), un par de croquetas (de jamón y bacalao), empanada gallega (es de atún y pimiento y repetimos porque estaba muy buena, pero la foto es de una unidad, es decir, bastante grande para compartir incluso). De beber, una botella de vino blanco seco extremeño (aunque reconozco que el Albariño, Ribeiro o el vino turbio son los típicos, me decanté por éste - la última vez tomamos Albariño -). El servicio de Magdi, una maravilla, pues tiene un trato cercano, muy amable y con una sonrisa que acompaña a su simpatía. Nos obsequió con unas almendras tostadas mientras llegaba la cena y acertó en sus sugerencias, sobre todo, con el vino. El otro camarero, Eduardo, muy eficiente y rápido, desde la barra. Por lo que hacen buen tándem, incluso con la chica (cuyo nombre no sé) que está de relaciones públicas fuera, pues también hace un buen papel tratando de atraer clientela. Por último, decir que el cocinero, Florín, no es gallego sino rumano, pero borda los platos y además, es un encanto de hombre (he estado en Rumanía de viaje y precisamente, estuvimos hablando largo y tendido de su país). De hecho, realmente lleva en España muchísimos años y está convencido de que es su sitio porque está muy feliz aquí y se nota. En resumen, la comida buena, tanto en cantidad como calidad y con los Yums se queda muy bien de precio. El lugar, un clásico de Alicante de toda la vida que ha cambiado de personal y de momento, ha acertado porque se manejan muy bien. Por ello, si buscáis un sitio relativamente tranquilo, pero a la vez céntrico con comida tradicional gallega, Rías Baixas es una excelente opción. ¡Volveremos pronto!"

"En general esta todo muy bueno, aunque el precio cantidad podría ser algo mejor, pero da gusto tener un sitio con comida típica de otras comunidades."