Colegio Evangelista Primaria Calle Loma Santa Lucía, 31013 Pamplona, Navarra

"Me parece genial que exista un colegio evangelico en Navarra, donde aprenden Valores, Respeto, Compañerismo y un ambiente Cristiano ❤️❤️❤️"

"Cuando estudiaba, recuerdo a un niño haciendo una grosería en clase. Cuando fui al profesor a contarle lo ocurrido, básicamente se rió y no hizo nada. Situaciones así viven los niños cada día en sus clases en muchos de los colegios, PERO NO AQUÍ. Hace 6 años que trabajo en este lugar. Como profesor puedo decir, que el ambiente de trabajo es espectacular. Los niños aprenden a respetar, a esforzarse, a hacer las cosas aunque les apetezca... y a la vez disfrutan de la cobertura y los resultados que eso da. Conozco de otros lugares a niños que lloraban por no querer ir a sus clases, pero aquí he tenido a alumnos llorando al saber que tendrían vacaciones. Siendo honesto, al terminar la carrera y ver a mis compañeros, pensé "¿A cuántos de ellos les confiaría la enseñanza de mis hijos?" No muchos de ellos pasaron la prueba, sin embargo, ahora que soy padre y conozco este colegio, éste es el lugar donde me gustaría que estén mis hijos cuando tengan edad. En resumen, un colegio 5 estrellas."

"Es un lugar como no he conocido otro antes. Me hubiera encantado poder llevar a mi hijo para que estudiase allí. Solo sé que los padres están encantados con los profesores y que los niños van muy contentos al colegio. También se que el profesorado trabaja con cada niño entregando todo su esfuerzo e interés para favorecer en lo máximo y lo mejor a cada alumno. Es tremendo!!"

"Tres de nuestros hijos van a ese colegio y es sorprendente verles llorar porque son vacaciones de Navidad o fin de semana y no tienen que ir a clases. Y más sorprendente es cada persona que forma parte del equipo de profesores y profesoras que dan su tiempo, su esfuerzo, sus estudios y posiciones, o dejan su casa entre semana, o incluso se viene con ella a Pamplona " tan solo" porque se fían de Dios. Cada mañana cuando les veo pararse frente a sus alumnos para entrar en clase sale una profunda gratitud y admiración hacia ellos. Gracias por cuidar tan bien de lo preciado de nuestro hogar."

"Aquí vienen mis dos hijos desde hace dos años, y eso que vivimos en Vitoria. Venimos todos los días, y ha sido una de las mejores decisiones de nuestra vida. ¡Cómo les enseñan, con qué amor, con qué humildad! Aquí les enseñan valores de verdad, el respeto, la obediencia, a perdonar y ser perdonados, a reconocer sus actos, tantas cosas... Pero no son lecciones de libro, les enseñan con su propia vida. Es un colegio 10."