Aldea Los Odres Calle Pozo, 1, 30414 Los Odres, Murcia

"Lamentable atención. Al llegar a la cabaña, la piscina estaba medio vacía, nos pusimos en contacto con el gerente y nos dijo que solucionaría el problema al momentos. Pues bien, después de casi 6 horas esperando no aparecía nadie, toda la tarde llamando y NO cogía el teléfono. Después de toda la tarde perdida, apareció el encargado y estuvo llenando la piscina durante más de 2 horas. Una verdadera pena, porque la zona y las cabañas están estupendas."

"Un lugar de ensueño, perfecta ubicación. Un lugar tranquilo, en plena naturaleza e ideal para desconectar. Las cabañas tienen de todo lo necesario para pasar unos días en pareja o en familia. Destacaríamos que lo más impactante fue lo bien que se ven las estrellas por la noche. Sin embargo, la atención al público fue pésima, ni siquiera vinieron a darnos la bienvenida, nos dejaron las llaves en un cajetín, el check in lo hicimos online. Dónde está la parte humana de las personas que en este tipo de turismo, siempre ha habido? Ni siquiera venir a decirte hola y bienvenidos. Además de cobrar un suplemento por perro y noche de 10 euros, que me parece excesivo en comparación con otras casas rurales. Tuvieron un problema a la hora de cobrar una parte de la reserva y estuvieron insistiendome para solucionarlo, cuando mi única intención era apagar el móvil cuando llegara a las cabañas, cuando pudieron cobrar la parte de la reserva me ignoraron y ni siquiera respondieron a una de las preguntas que les hice vía WhatsApp. Esta pregunta iba relacionada con el servicio de panadería que dicen tener en su guía todos los días sobre las 13:30, es mentira. Estuvimos allí de lunes a jueves y ni un día se escuchó la bocina con el servicio de panadería, por no hablar de la limpieza, pésima también. En su página web pone que tienen secador de pelo, pues bien, no sé si en algunas cabañas lo habrá. En la mía no lo había, sin embargo me pusieron de escusa que se lo habían robado y que no tenían otro en el almacén. Al día siguiente, el tal Paco viene a arreglar una mosquitera que estaba estropeada y me trae un secador, dejándose tirado en el monte el difusor y otro aplicador de éste. Por confusión personal me fui un día antes de lo que había reservado, no pude quedarme por obligaciones familiares. Pues bien, le escribo a Pedro, que es el que trabaja telemáticamente y quien insistió en cobrarme sin parar la mitad que faltaba de la reserva, y me dice que no me pueden devolver ese día. Pero sí me molestó en mis únicas vacaciones de todo el año para que solucionará un problema que debían solucionar ellos. Para nosotros deja mucho que desear, el precio es brutal en comparación con otras casas rurales que hemos visto y pensamos que si quieren cobrar eso deberían mejorar muchísimo este aspecto."

"Una experiencia única, en un entorno privilegiado. Cuidado hasta el mínimo detalle, disfrutamos de unos días inolvidables.Facil acceso y buena gastronomía hacen del entorno un lugar idílico para querer volver. Recomendado al 100% tanto para ir con niños como para ir en pareja tanto en invierno como en verano."