Connection Dance Center Calle Abolengo, 12, Carabanchel, 28025 Madrid

"Pésima atención al cliente, no cogen el telefono y contestan al mail 5 dias después. Nos confundimos en la fecha de la clase al hacer la compra por la app y mi hija no pudo asistir, nos han negado la devolución del dinero y tampoco la posibilidad de recuperar la clase."

"Tanto si llevas todo la vida bailando como si estás empezando ahora, Connection te acoge como ninguna otra academia. Profesionales súper simpáticos y sales de las clases con ganas de volver. Además, las personas que te atienden son un cielo!"

"No hay una escuela mejor para bailarines que quieran tomarse el baile de una forma sería y profesional. Los mejores profesores, instalaciones buenas, la mejor gestión, hacen que te comprometas y aprendas en todos los sentidos para desarrollarte tanto personalmente como profesionalmente. El mejor ambiente para divertirse y mejorar a la vez."

"Ante la situación tan difícil que vivimos en estos momentos de pandemia, y ante el cierre de Madrid, llamo a la Academia ya que mi hija se apuntó antes del cierre a dos clases puntuales de baile. Como no vivimos dentro de la ciudad, les pido información al respecto sobre las clases. Como tengo entendido en gimnasios no se permiten actividades de más de seis personas en recinto cerrado, pregunto si a ellos si se lo permiten, informandome dentro de la clase hacen subgrupos de seis? Les transmito mi intranquilidad por los demas miembros que conviven en la familia ante un posible contagio de mi hija en una clase con numerosos jóvenes bailando, y les solicito la devolución del dinero, o posponer las clases para otras fechas. No sólo no demuestran la más mínima empatía ante mi preocupación, sino que me deniegan de muy malas maneras y drásticamente mi petición. Realizaré por supuesto la pertinente reclamación ante consumo, y lo que estime oportuno."

"La gestión es pésima y el trato a los clientes es deplorable . Dejan muy claro que lo único que les importa es el dinero ya que según sus propias palabras “es un negocio”. Alardean de tener una aplicación, y nos hicieron apuntar nuestros datos en un folio en blanco, donde evidentemente no especificaban nada sobre el tratamiento de nuestros datos. La próxima vez que fuimos la hoja se había extraviado y tenían que hacernos de nuevo una ficha. Es una pena que la “escuela” funcione así de mal porque los profesores son buenos profesionales."