Bar Manolo

"Mi comentario no va hacia el bar sino hacia Manolo el "curandero" que le cobro 15 euros a mi madre por decirle NO puedo hacer nada y no estar ni 5 min en consulta después de esperar toda una mañana en el bar y enviarnos por segunda vez. La despachó con muy malas formas y le levantó la voz varias veces por lo que tuve que llamarle la atención. Esto es un robo a una persona mayor y un profesional serio no obligaría a pagar por un servicio no realizado. Lo que el no ayudó a mi madre ni a mi pues no fue capaz de sacarme ni una contractura de espalda. Nos están ayudando los fisioterapeutas de la Seguridad Social. Profesionales serios y bien formados. No se dejen engañar."

"Personas amables, lugar limpio y ordenado, precios razonables, fácil aparcamiento, amplia terraza y accesible. A poca distancia del río Miño en un entorno tranquilo."

"Por valorar, sólo valoraría positivamente su tortilla. Éramos un gripo de 5 personas, 3 tomamos café en la barra y 2 se sentaron en una de las mesas de la terraza. Eran las 7 y 30 hrs de la mañana. No había nadie en la terraza y el camarero de manera muy seca avisó a las 2 personas amigas nuestras q estaban en la mesa de la terraza, que no se podían sentar en esas mesas si no habían consumido. Para rematar, cuando los q estábamos dentro salimos afuera a junto de estas personas q nos esperaban, el camarero "con una sonrisa" (ironía) les vuelve a repetir q esas mesas son para gente q consuma. En resumen, atención mala, nada agradables. Podían ganar mucho más de lo q ganan con la gente q está esperando para ser atendida pero se ve q las sonrisas y la amabilidad están caras. Una pena porq la gente pasa muchas horas allí."

"El bar no merece mucho la pena... Pero el curandero (fisioterapeuta realmente) es de lo mejor que hay.. seguro que hay mucho turista de chanclas que no entiende de qué va el tema que lo criticarán sin tener ni idea de que hablan.. pero decir que cualquier deportista del lugar e incluso profesionales son atendidos en este lugar ante lesiones que médicos normales de pastillas,supositorios, vendajes e inyecciones no tienen ni puta idea de que hacer al no comprender el cuerpo humano."

"Nos echaron de manera indirecta de la única mesa que tienen en la terraza antes de las 8 de la tarde porque al parecer cerraba. Lo hicieron con muy malos modales, dando portazos, arrastrando las sillas libres y con cara de mal talante mientras la camarera de dentro se partía de risa. Las consumiciones caras y sin ningún pincho, ni con el café ni con una bebida. Único bar de la zona, por eso se nota la mala calidad del servicio. Nada recomendable, regentado por gente que no sabe estar de cara al público. Nunca más."