Restaurant Torre de les Aigües Camí de la Torre, 08401 Granollers, Barcelona

"Buen local, buena comida, servicio mejorable, normas absurdas, 2 turnos, turno de las 15h, te dicen si quieres aperitivo (cerveza y demás), entre que miras carta y decides necesitas un tiempo, pues no vienes con la carta leída de casa y más si vienes con niños. A las 15:30 vienen a decirte que cocina cierra a las 16h y que somos nosotros que tardamos en decidir, pedimos primeros para compartir, los traen todos a la vez de golpe, algunos fríos, comemos como pollos y al rato traen segundos, corre que te corre, fríos, nos los calientan sin problema, la comida decir que es muy buena, pedimos postres y café, con la comida en el gaznate, a las 17:00h traen cuenta, cerramos, por la noche trabajamos. Lo entendemos, es normal, pero en una 1:30 minutos comer y fuera no lo veo normal."

"Está ubicado en una masía preciosa. La comida está deliciosa y la atención de diez. La tarta de queso se cuela en mi top 5. Y alguna que otra he probado. Volveremos seguro."

"Menú diario con gran cantidad y variedad de platos. Grata sorpresa con el arroz de conejo y la fideua, aún pidiendo ración individual, traen paellera a la mesa. El tartar de atún no nos gustó nada, postres bastante bien."

"Restaurante correcto. Las meses estaban muy juntas y tenias poca intimidad. Servicio justito, no se puede poner una cubitera encima de una mesa pequeña, tuvimos que pedirles un pie de cubitera ya que se estaba llenando toda la mesa de agua, entre otros detalles que no nos parecieron normales dado el precio que se paga. Hacía mucha calor, el aire lo tenían a 28 grados eso y nada, lo mismo. Nunca habíamos visto un steak tartar donde de acompañamiento te pusieran patatas fritas… pero estaba bueno. Nos lo habían recomendado pero desgraciadamente no cumplió nuestras expectativas. Comimos de primero steak tartar y canelón de bolets con foie, y de segundos arroz al senyoret y arroz con escamarlanes con dos cafes Precio: 100€."

"Comer en La Torre de les Aigües ha sido una experiencia genial. El restaurante tiene varios salones donde, según los comensales, puedes comer de forma íntima y privada. La decoración es principalmente rústica, se trata de una antigua Masia ubicada en un entorno natural, rodeada de campos. El servicio es muy amable y atento. No se tiene la sensación de estar abandonado. La comida es deliciosa y cada plato está hecho con mimo y cuidado al detalle. El único pero que tengo es que no tienen cambiador para bebé en el baño."