La Valuisilla - Hotel Rural Calle Corral de Abaño, 37, 39580 Cicera, Cantabria

"Si duda uno de los lugares mas acogedores y originales donde hemos estado. Luis el propietario de este hotel, un hombre encantador con el que me ha encantado conversar ha sabido dar a su hotel un toque original y diferente. Es un hotel precioso, decorado con mucho gusto. Las habitaciones amplias y acogedoras, los salones muy comodos y llenos de detalles. Luis es un cocinero excelente , unos desayunos... sanos y ricos, cada dia uno diferente con productos naturales y de la zona y las cenas.... ufff. Agradecemos la atención prestada, hemos estado como en casa. Estamos toda la familia deseando poder volver.. Os lo recomiendo !! Y el pueblo precioso y muy tranquilo!!! 100% para descansar"

"Luis, su casa y sus desayunos son maravillosos. Un verdadero lujo de sitio en un pueblo encantador. Todo son detalles, desde el desayuno hasta la cama y la decoración. Lo hemos pasado estupendamente. Además el pueblo es parada muy cómoda para ir a fuente dé a hacer a alguna ruta o hacer alguna más cercana."

"Espectacular! El alojamiento, la ubicación, la atención, todo espectacular. Mejora cualquier expectativa. Desde los espectaculares desayunos, a las innumerables y preciosas rutas que puedes hacer desde la misma puerta del hotel o sitios encantadores que visitar. Tampoco es mala opción quedarse en el pueblo y ver la vida pasar lentamente o charlar con los peregrinos que pasan por el pueblo o disfrutar de la encantadora casona-palacio en la que estás alojado. El tiempo se detiene en Cicera. El artífice de todo esto es Luis, su propietario, y por no extenderme, solo diré que cuando salgáis de La Valuisilla dejaréis allí un amigo, bueno dos ya que también echaréis de menos a su fiel amigo Tristán. Todo esto tiene un pero: antes o después hay que volver a casa."

"Pasamos unos días muy tranquilos y relajados en este entorno tan especial, cerca de las montañas cántabras. Nos gustó el trato amable, cercano y conversador, al tiempo que respetuoso de Luís, su anfitrión. Los desayunos, cada día diferentes, sorprendentes y deliciosos, siempre con la descripción de Luís de un nuevo sitio maravilloso para descubrir. Un delicioso lugar para la tranquilidad y para volver a repetir."