Casa El Morro

"Estuvimos, una amiga y yo, desde el 16 al 19 de marzo en este espectacular alojamiento. El trato al llegar y durante la estancia, increíble, todo fueron facilidades. Las casas son muy bonitas y acogedoras, decoradas con mucho gusto y con materiales de primera calidad. El sitio de la piscina, increíble, y los jardines cuidadísimos. Contratamos dos masajes con Ana con los que volvimos a la península con 10 años menos. Ya tengo 3 personas que me han preguntado por este alojamiento para Semana Santa y seguro que van. ¡Gracias!"

"El sitio muy tranquilo PERO! Está algo dejado, quieren dar un toque balines pero se tiene que cuidar las cosas, éramos 3 y para dormir cada uno en una “cama” el sofá cama de el salón tenía 12 o 13 cojines, el salón parecía un campamento por todos los cojines que se tenían que sacar, a las 9 de la mañana aspirando el jardín con una máquina! El desayuno la verdad que para lo que cuesta el hospedaje que barato no es, deja bastante que desear, muy incomodo para coger los alimentos, muy muy poca variedad, la verdad es que por el precio que tiene podrían currárselo un poco más! Por otro lado, llegas a partir de las 12 de la noche y no hay nada de luz para acceder, siendo peligroso ya que hay bastantes escaleras para acceder. Cocina dejada y electrodomésticos que no funcionan. Siento poner esta reseña pero con el precio que tenéis deberías cuidar un poco los detalles. Podeis contestar al resto de cosas que os menciono en la reseña...."

"Llegamos un domingo al mediodía y nos marchamos el viernes siguiente. Mi mujer, mi hija y yo nos alojamos en una casita con vistas al pueblo de Uga, a 1 km aprox, con el fondo de las formas suaves del Timanfaya. Con este establecimiento pasa lo mismo que con Lanzarote entero: aunque se lo fotografíe muy bien es difícil captar la energía que transmite el lugar. Son varias casitas independientes, decoradas con un toque exótico y colorista, con mobiliario de madera con tallas artesanales, claraboyas en paredes y techo por donde entra la luz natural, tejidos artesanales, etc. Los alojamientos se esparcen sobre un terreno irregular, con galerías sombreadas por la vegetación, grupos de escalones que llevan a los diferentes niveles, jardines de cactus, suculentas y especies aromáticas, una piscina protegida por unos cristales laterales de los vientos alisios, una yurta para masajes, sala de yoga, etc. El desayunador es una estructura de madera acristalada, de planta exagonal donde se sirve un desayuno generoso y variado. El trato de Raquel y Laura fue sumamente atento y discreto, y contribuyó a una experiencia inolvidable que esperamos repetir."

"Un acierto enorme habernos alojado en Casa El Morro, un lugar precioso y sobre todo diferente en lanzarote, las habitaciones están rodeadas de un entorno muy agradable que se respira mucha paz ideal para descansar. El servicio de atención insuperable, están pendientes de todo lo que haga falta. Volveremos seguro!!!! Altamente recomendado!!!!"

"Muy sucio y descuidado. La casa estaba llena de hormigas, las sábanas sucias y pedimos cambiarlas, el sofá cama sin aspirar desde hacía años y con mucha suciedad. Las instalaciones estaban abandonadas, escaleras rotas, tumbonas manchadas, las plantas secas y algunas incluso con telarañas, mantel con agujeros, el wifi no funcionaba bien.... En 5 días la dueña no apareció, nunca la vimos y ni siquiera me contestó cuando le dije que las sábanas estaban sucias y que teníamos hormigas por todo el baño. No lo recomiendo, no es como ves en las fotos, el trato directamente no hay trato, estuvimos totalmente solas sin recomendación de nada ni interés alguno, solamente nos escribió para decirnos el día antes de salir que a las 11 como tarde teníamos que irnos. Una vergüenza"