Bodegas Rubicón

"Bodega que puedes visitar libremente en su interior. El lugar es bonito y puedes hacer fotos. La cata no fue tan interesante. Nos puso un poco de vino en un catavinos por 2€ cada una y no nos explicó nada. En ese momento no habían más visitantes. Estoy acostumbrada a que en las catas te den alguna información. La sensación fue de ir a un bar y tomarte una pequeña consumición. Tampoco me gustaron tanto los dos vinos que probamos. Unido hay un bar restaurante donde puedes comer o tomar algo."

"Visita libre gratuita, echamos de menos alguna cartelería y más información sobre la historia de la bodega, sobre las técnicas de cultivo de la vid, regadío... Al finalizar probamos las diferentes variantes, el rosado y semidulce los más ricos en mi opinión. Cada copa cuesta 2 euros. La atención también fue buena y servicial. Nos llevamos de la tienda un chocolate negro con miel que tiene muy buena pinta."

"Entrada gratuita, podéis pasar libremente por su casa museo. Muy buen precio de vino. De los probados me ha gustado muchísimo el Rubicon moscatel (para los amantes de licores dulces está fenomenal). Personal muy atento"

"Todo genial, sin ponerle un pero. El personal muy muy amable. La comida muy buena. El pulpo frito está muy blandito y exquisito. El mojo que acompaña a las papas arrugás estaba muy bueno. El cochino en adobo también muy bueno y jugoso. El pan para acompañar buenísimo, pan de pueblo con ajonjolí, impresionante para miguar con el mojo. De postre un mouse de gofio que a pesar de no ser casero estaba muy bueno."

"La bodega en sí es pequeña y eché en falta que nos ofrecieran alguna degustación con tapa o visita guiada. Puedes ver libremente la bodega y una casa típica Canaria. Lo mejor el restaurante, que a la sombra de unos enormes sauces en la terraza, comimos unas tapas estupendas y muy agusto. El trato del personal fue muy bueno. Recomiendo este sitio para comer algo y probar los vinos que ofrecen."