Punto Geodésico Torre del Puerto

"Maravillosas vistas desde el vértice"

"A mediados del siglo XIX el escritor Luis María Ramírez de las Casas-Deza dice que "encuéntrese igualmente en término y al Oeste. de esta villa [de Baena] la Torre del Puerto, edificio ya casi arruinado en su elevado cerro donde se juntan los términos de Baena y de Montilla, de fábrica del tiempo de los Arabes y se hallan allí vestigios de edificios y moneas romanas y arábigas. Cean Bermudez cree que estuvo en este sitio la Soricia o Soricaria que suena en las guerras de Cesar con los Pompeyos; mas Cortés la reduce al "cortijo de Jorquera" diciendo que los Arabes así corrompieron aquel nombre". Se puede comprobar, pues, que la torre del puerto se encontraba ya hacia 1850 en estado de ruina y abandono. También F. Valverde y Perales nos dice en su libro de 1903 que la torre estaba por esa época "ya rota y deshecha por todas partes". Situada en el punto más elevado del Monte Horquera, sobre un elevado cerro en el vértice geodésico 815. Está a caballo entre los términos municipales de Castro del Río y Nueva Carteya, vigilando el camino de Castro hacia Cabra y amplios horizontes hacia el valle del Guadajoz y los terrenos al sur del Monte Horquera, los de Montilla, Montemayor, Monturque, Torre Morana, Doña Mencía, la Torre de las Atalayas, Cabra, Córdoba, Espejo así como las tierras de Aguilar de la Frontera. La Torre es de forma cilíndrica y se encuentra en la actualidad muy deteriorada, pues sólo se eleva sobre la roca natural -que tiene como basamento y cimiento- un metro por su parte más alta. En cambio, conserva casi todo su contorno. La obra está realizada a base de sillares o bloques de piedra caliza sin apenas desbastar y de diversos tamaños, oscilando alrededor de los 1x0,60x0,40 metros y pequeños cascotes o lajas de piedra que sirven de cuñas para los más voluminosos. El aparejo, en lo que se puede apreciar, está formado de hiladas aparentemente pseudoisódomas y enlazadas unas con otras mediante obra de cemento de cierta dureza, que en algunas zonas da la impresión de no estar formado el muro por unidades independientes, sino por un solo bloque. El grosor del muro es de 1,50 metros, encerrando un espacio interior de 4,70 metros de diámetro, mientras que al exterior tiene 11 metros. Esta torre presenta unas características muy similares a la Torre Alta y a la Torre del Morchón, ambas en el campo de Priego, en cuanto a sus dimensiones, pues se pueden clasificar entre las cilíndricas y troncocónicas de mayor tamaño y además son huecas desde su base. En lo que se refiere a la naturaleza de su obra y a la estructura de su aparejo, siempre teniendo en cuenta los escasos restos que han quedado de ella, podemos apuntar que son muy semejantes a estas otras dos torres. Las cerámicas visibles en el lugar son muy escasas, apareciendo algunos fragmentos de terra sigillata, otras atípicas y muy pocas vidriadas de tonos melados que se dispersan por las tierras de labor que circundan la torre. En sus proximidades, como a unos 500 metros, la rodea un viejo camino que en algunos de sus tramos presenta restos de posible calzada."