Sportown

"El trato del dependiente rapado es pésimo… desgana, malas miradas, vamos que por no verle la cara compro las zapas en otro sitio…"

"Muy contento con la compra. Me atendió esta tarde la chica alta morena, muy profesional, porque sabía estar. Me ha aconsejado, ha sido simpática, y no me estaba atosigando. La perfecta vendedora. Su compañero Roberto también es un cielo. Volveré sin duda"

"Ésta tarde he entrado con mi hija a ésta tienda, ya que a ella le gusta mucho la ropa de deporte, se ha gastado 70 euros y nos han tratado como si fuesemos dos delincuentes. Los tres vendedores pegados a nuestras espaldas, en el probador mi hija ha tenido que dejar la cortina sin echar porq no paraban de entrar y salir y uno de ellos, calvo, cruzado de brazos a nuestro lado mientras mi hija se probaba unas zapatillas. Yo comprendo que tienen que atender y vigilar pero de ahí a que una se sienta asediada sin ningún motivo, como que no. Si tienen dudas que pongan cámaras de vigilancia o un guarda de seguridad, pero por favor que nos traten con respeto y podamos comprar relajadas. Porque me he ido con ansiedad y con ganas de haberles soltado una fresca, que por educación no lo he hecho."

"Me gasto una pasta en dos regalos y sinceramente, habiendo sido encargado en una tienda de ropa me sorprende la desgana del chico rapado ha sido brutal. He comprado los regalos allí xq me montaba en el tren y no tenía otra opción pero vaya… pero iba buscando unas zapas para mi y no me las he comprado viendo el percal. Pregunto que si tiene una camiseta de un determinado estilo… me atiende con desgana, me ha mirado hasta mal. Le pregunto que si el patrón es ancho o normal xa coger una talla u otra… como si le pregunto si va a llover. Ninguna iniciativa en ayudar al cliente. Voy a pagar y le ha faltado tirarme las camisetas a la cara. Es que además ahora viendo las reseñas veo que no soy el único No vuelvo ni aunque me regalen la ropa vaya."

"Valiente poca educación y pocas ganas de trabajar tienen todos los trabajadores de esta tienda.. en concreto el chico rapado , no saluda al entrar , y cuando va a cobrar rompe el papel que envuelve el zapato en vez de abrirlo para ver si coinciden los números, cuando ya me ha cobrado le digo que me de una bolsa regalo y que me la cobre aparte y con toda su cara me dice que no tiene y yo viéndola encima del mostrador …. Cuando me voy le digo gracias y hasta luego y ni me mira a la cara. Jamás volveré"