Albergue Cabrales

"Para empezar debo decir que sabíamos qué tipo de alojamiento estábamos contratando, pero por las fechas tan ajustadas no teníamos muchas más opciones. El albergue está situado en un pueblo pequeño pero con servicios, tales como bar restaurante, tiendas, etc. Efectivamente, para llegar al albergue tienes que atravesar el pueblo y las calles son estrechas, pero se pasa bien. El principal problema son las habitaciones, y sobre todo las camas. Las habitaciones son minúsculas, el baño más pequeño todavía, y las camas son absolutamente insufribles. No porque sean literas, sino porque los colchones están para tirarlos a la basura directamente. No entiendo como algo tan básico no está en condiciones de uso. La limpieza de la habitación está bien y la ropa de cama y toallas también. En cuanto a tranquilidad debo decir que la escalera que sube a las habitaciones, porque no hay ascensor, es de madera, por tanto cuando están subiendo o bajando por ella, en la habitación escuchas como si fueran caballos. A los que están en las habitaciones contiguas también se les oye bastante. En el recinto del albergue hay unas cuantas plazas de parking, pero son pocas y justo enfrente hay sitio para aparcar libremente. Las puertas del recinto no se cierran por la noche. Por último, el desayuno es muy básico, ya que tiene leche, café, cacao, un tipo de zumo envasado, pan de molde y sobaos y magdalenas industriales. Nada más. El comedor está lleno de mesas largas con bancos y es difícil moverse para montar tu desayuno, y como tienen la puerta abierta al porche, está plagado de moscas. En definitiva, yo sólo reservaría aquí si no tenéis otra opción. Hemos estado en hoteles durante el viaje muchísimo mejores y más baratos."

"Habitacion un poco pequeñas, pero limpio,colchones nuevos y desayuno muy bien por su precio 100%recomendado"

"El desayuno parecia la batalla de las termopilas. Atascos de 20 minutos en sección magdalenas, aconsejaria reubicar a madrileños en la orilla de rio"

"Un lugar muy bonito y tranquilo. Para ser un albergue, la comodidad de la habitación super bien. Aunque tienen que apretar los tornillos de las camas que están sueltos. Relación Calidad-precio mejor que bien, además del desayuno incluido. Recomiendo a los que vayan, que dejen descansar a los que duermen allí. Entre ruidos, golpes y voces de los que se iban de madrugada cuando estuvimos, se pasaron bastante con esa falta de respeto. En nuestra habitación olía bastante a gasolina en varias ocasiones, supongo que de algún motor cerca"

"Las camas son literas muy pequeñas y antiguas. Eran inestables y muy poco higiénicas. Encontramos varios pelos en las camas y la solución que nos dieron es que volviéramos a hacer nosotros las camas quitando las sábanas. El baño es minúsculo, la puerta es corredera y no cierra bien. Muy mala experiencia."