Embarcadero

"Las camareras son unos maleducados, mención expresa a una rubia entradita y una señora mayor. Maleducadas y unas malas maneras impropias de un sitio tan bonito. El tinto de verano le echan más huelo q tinto. Le he quitado el hielo, lo he puesto en un vaso vacío, y LITERALMENTE han echado lo que el vaso de la cerveza que adjunto. Lo comento a la camarera y leha faltado decirme q si no me gusta que me vaya. Sitio con vistas espectaculares estropeado por la poca educación y saber estar de ambas. Copas a 8€ escuetitas. La comida no la he probado"

"Fui aquí con un grupo grande de personas (entre 10 a 20) y la experiencia fue para no repetir. Fue el 19 de octubre cuando excepcionalmente llovía a cántaros en Sevilla. Aún estando en el local solo nosotros, el camarero y la camarera no nos pusieron facilidades de ningún tipo de facilidades: no tuvimos permitido ni mover mesas, ni sillas, ni abrir una cuenta para ir apuntando, ni vender vales para cerveza, ni poner música de fondo ni frutos secos con las copas etc. En todo momento daba la sensación de que querían que nos fuéramos (a pesar de estar consumiendo bastante y siendo muy educados). Parece que el personal tiene miedo del dueño. Muy poca visión de negocio y cero cuidado al cliente."

"Lo mejor que tiene este sitio de copas es la panorámica de la Torre del Oro y del Guadalquivir: un punto privilegiado junto al río para disfrutar de uno de los emblemas de Sevilla. El resto, mejorable: camareros muy ariscos, parece como si te estuvieran haciendo un favor por atenderte tras la barra y precios elevados (8€ por una copa de combinado medio)."

"Lugar soñado. Me encanta. Hemos estado hoy 3/6/23 tomando copas en una mesa de pie. Se queda libre una mesa baja y una camarera no me deja sentarme porque tenía unos amigos con dos medianas y los sentó. Qué hicimos nosotros, pues nos fuimos. A ver cuánto dinero les dejó esa mesa. Muy mal llevado. Y además la camarera con aires de superioridad. No deja de ser una empleada que le da igual la ganancia del negocio. No iremos más. Una pena porque el sitio es ideal. Pero la gente joven no entiende."

"Un lugar con encanto para tomarte una copita con unas vistas impresionantes al río y la Torre del Oro. Según día y hora puede estar masificado y no se pueden hacer reservas. Es tener la suerte de llegar y toparte con una mesa. No es especialmente barato y más teniendo en cuenta que no sirven en mesa, tienes que pedir en barra y servirte tú mismo. Pero el ambiente es ideal y el lugar, merece la pena"