Franconia Fusion Búnker

"Una experiencia desagradable desde la llegada. Todas las mesas "reservadas" pero si preguntas te sientan, aunque de mala gana. El responsable dijo que solo podíamos comer de picoteo, y después el camarero nos dijo que podíamos pedir lo que quisiéramos pero que recomendaba eso, picotear. Las bebidas tardaban y al final nos fuimos después de acabarlas. Nos retiraron las cartas con muchas ganas y se alegraron de que no comiésemos. Desde luego lo que parece es que no tienen ninguna gana de trabajar. No volvería."

"Fuimos con intenciones de cenar y al final tuvimos que buscar otra opción. De primeras llegamos y estaban todas la mesas reservadas, que al principio hicimos amago de irnos porque estaban reservadas pero hicimos por ir a preguntar si quizá tenían debajo, craso error. Le dije que éramos siete y que si tenía mesa, y de muy mala gana nos dio una mesa de 6 y nos dijo que arrimasemos una silla. Si quiera antes de sentarnos nos miró el señor, un poco amenazante, y nos dijo que sólo picar, que nada de platos, sólo picar. Otro compañero, más amable, nos dijo que nos recomendaba pedir cosas de picoteo porque el resto iba a tardar más. Pedimos una bebida cada uno y pedimos la carta, tardo todo mucho y la carta la tuvimos que pedir varias veces hasta que nos la dieron. Al final mirando las cosas de picar, no nos apetecía nada de la escasa carta que tienen y la dijimos amablemente que no queríamos al final pedir nada, nos quitó las cartas de las manos y nos dijo: Bien! Cómo feliz de no tener que servirnos comida. Una vez más la cuenta tardó muchísimo, como si quisieran que no les pagasemos. Luego al irnos nos fijamos que TODAS las mesas de alrededor, incluida algunas que llegaron después que nosotros, tenían platos servidos, tanto para compartir como individuales. No sé por qué pero parece que somos personas non gratas en ese sitio. Entiendo que en un trabajo de cara al público (y más en restauración), no puedes estar de buenas el 100% de las veces y de los días, pero pese a eso, nos sentimos bastante como clientes de segunda, tanto por el trato como por el servicio. Personalmente me gustaba mucho el Búnker, tanto por su variedad de cervezas como por su amplia carta y cercanía de los trabajadores. Pese a que se conserva el antiguo perfil del restaurante, ya no es el mismo y se nota la diferencia. Creo que me costará volver a este sitio después del trato recibido."

"Tenían un Hot Dog que ha sido de los más ricos que he probado. Deberían introducirlo en la carta. El dueño del local, muy atento. La currywurst, imprescindible. Das ist sehr gut!"

"Notable. Bien cocinado, buen servicio y bian situado. Muy agradable"

"Esperamos 50 minutos, para dos platos de comida, una papa rellena y un wok de verduras con ternera, en la que apenas había carne. Así con menos del 50% de mesas ocupadas. Lo salva la ubicación."