Parrilla La Espicha

"Restaurante con una terraza agradable pero comida ‘normal’. Las croquetas de jamón sabían mucho a pimienta negra, las patatas bravas estaban dulces y las carnes de la parrillada duras."

"Excelente relación calidad precio, encantada."

"El pedido por GLOVO regular. El cachopo espicha muy bueno, las costillas de cerdo al ajillo tan refritas y resecas que tiré la mitad. Los pimientos y el chimichurri nunca aparecieron."

"Para un día que salgo a comer en familia , una parrilla mediocre bastante cara acorde con lo que llevaba que eran 4 costillas , un criollo y dos cachos de filete ,dos de lomo mas dos trozos de pechuga de pollo, pedimos patatas 2 salsas la brava no estaba buena pero el alioli era no comestible con la cantidad de ajo que llevaba , servicio con poca atención y lo mejor viene cuando le digo que el filete de la parrillada tiene mal sabor, el que nos atendía me contesto esto : pues no se por que será por que yo lo Cené ayer y estaba bueno. Eso da muy mala imagen y me crea desconfianza hacia todo lo que hemos comido un familiar mio la probo y la tuvo que escupir de la boca , al menos se hubiesen disculpado y cambiar el plato... O no cobrarnos algo que no disfrutamos me parece vergonzoso no volveré mas."

"Habíamos ido una vez mi pareja y yo hace bastante tiempo y habíamos quedado encantados con el pollo al ajillo así que hoy decidimos hacer un pedido a domicilio. Pedimos, aparte del pollo, unas patatas tres salsas, morcilla matachana y fritos de pescado. Nuestra idea era pedir chipirones fritos pero preguntamos si venían en los fritos de pescado y al decirnos que sí los cambiamos por la matachana. Hicimos el pedido por teléfono a las 13:30 y nos dijeron que tardaría aproximadamente media hora. A las 14:40 decidimos llamar al no haber llegado el pedido. La chica que me atiende dice que el repartidor ha venido dos veces y no hay nadie en casa, cuando no nos habíamos movido de aquí. Le pido que compruebe que está bien la dirección y me dice que hablará con el repartidor para que vuelva. A los 10 minutos vuelvo a llamar ante la incertidumbre de si en algún momento va a llegar la comida o tengo que cambiar de plan. Me dice que el repartidor está haciendo varias entregas y que le deja un mensaje para que venga en cuanto pueda y antes de colgar llegó el repartidor. Después de casi hora y media de espera decidimos intentar disfrutar de la comida. Menuda sorpresa nos llevamos con los fritos de pescado...no sé si lo veis en la foto pero los chipirones son inexistentes. El pollo fue lo único que mereció la pena, lo demás no podemos decir que estuviera malo, pero muy "normalito". Las patatas que venían con alioli fueron casi intactas a la basura porque era imposible de comer por lo fuerte que estaba. Por otro lado, y lógico por el tiempo que pasó entre que hicimos el pedido y llegó, no estaba lo suficientemente caliente. Una decepción. Lo que era muy buen recuerdo de esta sidrería se ha convertido en un "aquí no volvemos a pedir", por la desorganización, la falta de empatía de quien me atendió por teléfono, la información errónea del contenido de los platos... Me llama mucho la atención que en los tiempos que corren no traten de cuidar a la clientela."