Il Gondoliere (centro)

"Teníamos una reserva a las 15:15 y nos sentamos a las 16:15. Tardaron mucho tiempo en tomarnos nota y en traer la comida (más de 1 hora). La comida estaba buena y los precios también, pero parece que no es buena idea ir un sábado porque van desbordados."

"Macarrones al horno, un clásico que merece la pena probar. Raciones muy abundantes y precios muy buenos, cubriendo totalmente la relación calidad-precio. Es un lugar un poco ruidoso, ya que suele haber celebraciones tipo cumpleaños, despedida de soltero/a, sobre todo si te ubican en la parte central. Cuentan con una parte trasera más íntima y con menos ruido. Servicio rápido y camareros amables. No es el mejor italiano de Granada pero merece la pena ir alguna vez."

"He estado tres veces en este local y creo que nunca había comido tan mal como hoy. He llevado a unos familiares recomendados para que lo probaran y no he podido quedar peor. Nos han sentado en la última mesa que quedaba, a pesar de tener reserva. Estábamos literalmente pegados a la mesa de al lado, silla con silla. Han tardado 1h20 exacta en traernos el primer plato, pero el primer plato caliente. Teníamos una ensalada pendiente que nos han puesto como último plato, y porque la hemos reclamado. Por no hablar de una cerveza que ha llegado tras pedirla tres veces y un cortador de pizza (que no había). No venían a tomarnos nota de los postres, casi nos vamos sin probarlos. Y por si no era suficiente, los cafés han sido pedidos a tres camareros diferentes (a la tercera va la vencida dicen). Es una pena que no dé tiempo a formar a los camareros, ya que, tienen gran variedad de elaboraciones muy buenas a un precio bastante competente. Las pizzas son grandes y la pasta está espectacular. El local tiene muchísimas mesas que se llenan, sobre todo los fines de semana. Aconsejo reservar antes de acudir."

"Comenzamos con la comida y continuaremos con el servicio, que aviso que fue muy deficiente. Tengo que decir que la cocción de los ingredientes y la masa de la pizza eran de 10. Las pastas estaban bastante buenas y la cantidad era muy generosa. El servicio fue muy deficiente y excluyó del servicio a la chica que hizo todo lo posible para encontrarnos mesa en plena hora punta. Continuando con el servicio, tuvimos casi que rogarle al camarero los vasos de las niñas y el queso de su pasta brilló por su ausencia. La pizza que me pedí se olvido de ella y acabé comiendo al mismo tiempo que las niñas se tomaban el postre. Podemos hablar del servicio como deficiente porque no tienen ninguna excusa debido a todos los camareros que tenían en plantilla. En definitiva,sensación agridulce por culpa del servicio."